¡Cuánto tiempo ausente de este blog! Aquí estoy nuevamente para contar lo ocurrido en estos primeros tres meses de libertad.
Sabia que el verdadero reto sería mantenerme en el peso deseado. Es toda una lucha, no cabe duda. Tener toda la comida al alcance, saber que se puede comer con moderacion y en los dias establecidos.
Lo confieso, he tomado libertad extra y se que pago las consecuencias. Recepacité a tiempo y trato de enmendar el camino.
Inicie con el ejercicio, no con la frecuencia que debo pero poco a poco. Bicicleta, un poco de pesas y nataciòn.Ha mejorado mi condición fìsica. Lo comprobé el domingo durante el paseo en bicicleta por la via recreactiva.
Regrese a las clases de yoga para comprobar que sigo siendo un tronco carente de flexibilidad, pero tambien me he dado cuenta que con la pràctica podré tener avances.
Traigo un gran antojo de alimentos dulces. Es inevitable. Creo que es producto de la ansiedad que siento con frecuencia.
Sigo cocinando mis alimentos, bajo en grasa y con suficientes frutas y verduras.
Esta batalla es difícil y si sóla no puedo enfrentarla, no me importa pedir ayuda médica permanente. Quiero mantenerme delgada como hasta ahora. No le permitiré a mi cuerpo y a mi salud fallarles nuevamente.
