viernes, 29 de abril de 2011

LA META CADA VEZ MAS CERCA




Así como  me siento yo ahora, creo que deben sentirse los maratonistas, cuando después de recorrer más de 40 kilómetros ven cada cada vez más el letrero de "Meta". El esfuerzo ha valido la pena porque  están a punto de llegar, a lo mejor no en primer lugar, pero terminaron la competencia.

Después de casi 6 meses, estoy a dos kilos de llegar a la meta que me tracé cuando me propuse bajar de peso. Que lejos veía hace un año este letrero de meta. Creí que nunca iniciaría la carrera y peor aun, que no la terminaría.

Me siento de maravilla,  me veo de maravilla. Mi autoestima esta por los cielos, como hace mucho que no estaba.  Sigo poniendo ropa enorme en la bolsa de prenda a regalar. Sigo ajustando pantalones y faldas para que me queden mejor y sigo comprando una que otra prenda para lucir mi nueva figura.

Lo que sigue es el ejercicio. Ya quiero empezar a ejercitarme. Veo la meta más cerca


miércoles, 20 de abril de 2011

VACACIONES A LA VISTA

Inicia el descanso de Semana Santa. Cuatro días de paseo que sin duda serán un reto para seguir el régimen alimenticio.

Creo que salir de casa cuando uno está a dieta no es tan sencillo, será por eso que he rechazado invitaciones. Pienso que es mejor mantenerme alejada de las tentaciones culinaria, aunque en casa abundan.

Estoy tan cerca de la meta que  no  quiero fallar. Además el Dr. lo advirtió esta mañana "Portese bien" Bajé dos kilos másy me siento muy contenta.

Nos leeremos el próximo lunes. Disfruten su descanso, si lo tienen y coman frutas y verduras.
Las empanadas de Semana Santa este año, sólo de lejitos y de vista.

martes, 19 de abril de 2011

EN EL CONSULTORIO MEDICO

Como casi cada lunes , desde hace cinco meses, llegué al consultorio del Dr. Nicolás. Había  pocos pacientes, quizá por el inicio de la Semana Santa. Es curioso lo que se puede escuchar en una sala de espera.

La cita  habitual puede durar 10 minutos, pero cuando es un paciente de primera vez se prolonga hasta 30 minutos,  porque le explican en que consiste el tratamiento y le dan la lista de los alimentos prohibidos.

Esta vez,  me encontré a mi amiga Becky, por quien llegué con el Dr. Nicolás. Ella me proporcionó los datos del médico que me ha ayudado a perder 25 kilos.

- ¿Cuánto has bajado? - me preguntó Becky.
- 25 kilos, le dije y noté su cara de asombro.
-¿ 25 kilos? Ya bajaste mas que mis amigos.
Recordó la última vez que nos vimos hace un año.
- ¡Pero si la otra vez que te ví no tenías tantos!
- Si tenía, pero estaban bien repartidos, le dije entre risas.

En la  Unidad Médica en la que se encuentra el consultorio hay varios especialistas, pero somos muy evidentes los pacientes que seguimos el tratamiento para bajar de peso porque llegamos con una hoja blanca en la que día por día, nos anota lo que comeremos en el desayuno, la comida y la cena. También podemos reconocernos porque vamos el mismo día, porque la ropa que usamos nos queda mas floja o porque comenzamos a platicar de nuestros logros.  ¡ Nos sentimos orgullosos!

Visitar al doctor dos veces por semana me ha obligado a ser disciplinada. Se que la supervisión es continua  y que cualquier falla se reflejará tarde o temprano en la báscula. He sido muy honesta cuando he cometido pecadillos, han sido muy pocos, contados con los dedos de una mano. De nada sirve portarme mal. Como lo he dicho desde noviembre pasado la constancia, fuerza de voluntad y la honestidad, han sido la clave de mi éxito.  

Ayer mientras esperaba, escuche la conversacion de un paciente de primera vez.
- Estoy aquí  con el doctor que vienes tu. ¡ con todo lo que has bajado! Me dio envidia, de la buena.
Yo estaba sentada casi al lado, aunque era inevitable escucharlo en toda la sala.
- Ya me hice todos los estudios que me pidió, a ver que tal.

Era mi turno y subí al consultorio. Quizá en la báscula esta vez no se reflejó tanto mi esfuerzo, pero me siento tan bien y tan contenta, que voy por un día más.

martes, 5 de abril de 2011

¡¡ A COMER SE HA DICHO !!

Esta mañana, leía el artículo de la nutrióloga Sol Sigal sobre las dietas y el comer mucho poco  o nada para bajar de peso. Ella afirma categórica “ ...  prohibido sentir hambre! Regla  número uno de una dieta correcta, ya que el hambre es señal inequívoca de que estás comiendo poco y mal”.

Así queda eliminada la idea de que entre menos comas cuando estas a dieta, más peso perderás. Ya lo sabía y lo he confirmado a lo largo de estos cinco meses en régimen alimenticio. Ya antes en otro tratamiento la recomendación era no dejar pasar más de cuatro horas sin probar alimento.

Aquí la explicación de la nutrióloga Sigal “Sucede que cuando uno se mata de hambre, lejos de bajar grasa, la aumenta. El cuerpo tiene un requerimiento mínimo de calorías que debe consumir, ya que las gasta nada más por existir y mantener las funciones vitales, eso se conoce como metabolismo basal” Este se calcula conforme al sexo, el peso, la estatura y la edad y suele ser el 80% del gasto calórico diario.

“Una vez que se conoce el metabolismo basal, se sabe que por lo menos esas calorías deben comerse. ¿Qué pasa si comemos menos que las que cubren el basal? Hacemos el metabolismo más lento, almacenamos todo lo que consuminos (y en forma de grasa) y utilizamos como fuente de energía todo menos la grasa, por eso se baja de peso, pero no de medidas. Claro, todo esto sin pensar que además la pasamos fatal, estamos de malas, nos sentimos muy mal y la ropa sigue apretándonos.
Por eso la regla a seguir para bajar de peso y mantenerse es comer, comer y comer pero bien.  Tres comidas fuertes y dos colacione. De esta forma se garantizan las calorías necesarias y se tranquilizamos al metabolismo, es decir, como recibe alimento todo el tiempo no se estresa y sigue funcionando eficientemente.