Hoy termina el día de fruta. Ya siento un poco de hambre. Regreso a la dieta hiperprotéica. Y entonces voy a extrañar la fruta y el yogurth.
Me siento muy contenta porque mi gran logro se sigue notando. La gente me comenta sobre mi peso. Así como los kilos de mas se notan de inmediato, los kilos de menos se echan de ver. Y los halagos a la vanidad aparecen e insisto, que bien se siente con el trabajo que me cuesta desde siempre, recibir el reconocimiento.
En las últimas dos semanas he compartido los dato del Dr. Nicolás con varias personas que me han preguntado como le hice. Ponerlos en contacto con la persona que me ha apoyado en esta lucha contra los kilos de más me gusta, porque así más personas pueden inicar su lucha contra el terrible sobrepeso. Lo comparo con una receta de cocina, cuando sale delicioso un platillo, cuesta trabajo compartir la manera de prepararlo. Confiada en mis logros, ya llegó al consultorio Rocío, una compañera de trabajo que hizo cita, conocio el tratamiento, ya lo inicio y ya comenzó a bajar.
Y si mas personas me preguntan, con gusto les entregaré una tarjeta del Dr. Nicolás.
Ahora, a comer unos chicharrones de cerdo, el tentenpie de la tarde.
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